El Presente

El día de hoy es un regalo. Por eso se llama presente

En el momento actual es que encontramos la verdadera paz, el amor,  la libertad y de la felicidad.

¿Cómo lograrlo?,

¿Cómo hacer para que la mente permanezca aquí y ahora todo el tiempo con todas las distracciones del mundo actual?

Meditar requiere un esfuerzo, y no todos estamos dispuestos a asumirlo.

¿Qué dirías si te preguntara a ti cuán presente estás en tu vida?

Todos pasamos tanto tiempo preocupándonos por el futuro, tratando de prepararnos para cualquier eventualidad que nos olvidamos del hoy.

Nos preocupamos con dudas tales como:

¿Qué sucede si pierdo mi trabajo?

¿Nunca encontraré el amor? ¿Cómo voy a cuidar a mis padres enfermos?

¿Cómo voy a criar y sostener a mis hijos?

Pero la verdad es que no podemos controlar la vida; la mayoría de las cosas están fuera de nuestro manejo. Además, todo puede cambiar en un instante para mejor o para peor. Por lo tanto, en lugar de tensionarnos y preocuparnos por mantener todo controlado, tal vez deberíamos aprender a soltar y confiar.

La vida es un fluir constante de momentos, y cada uno es único e irrepetible. Yo antes solía guardar las cosas nuevas que recibía o compraba para usarlas en alguna ocasión especial.

Pero me di cuenta de que cada experiencia debe ser vivida plenamente, no a medias. Mucha gente reserva lo mejor que tiene para algún momento adecuado, y la verdad es que cada momento es el adecuado.

Si quieres comenzar a conectarte con tu momento presente,el mindfulness seria una herramienta poderosa para tu vida.

Por eso te invito a que comiences a practicar y a poner toda tu energía en cada cosa que hagas y que cada mañana te despiertes pensando “este día es especial” y hagas lo que sientas que tienes que hacer. Pero hazlo hoy. No postergues tu felicidad, porque quizás ese momento que esperas nunca llegue. Sé feliz hoy.

Conecta con tu interior

Conecta con tu interior

Conectar con uno mismo es la clave de toda transformación personal.

 
Vivimos en la sociedad de las prisas y de la saturación de información.

Dedicar tiempo a escucharse, explorarse y descubrir nuestras emociones son la clave para mejorar nuestro bienestar.

¿Qué significa conectar con uno mismo?

Conecta con tu poder interior

Escúchate a ti mismo/a

Mira dentro de ti

Suena sencillo... ¿No?

Es más que eso…

  • Debes comenzar conociendo tu historia, Reconocer y observar tus conflictos personales.
  • Observar pensamiento y emociones, creencias.
  • Aceptar y asumir las oportunidades que tus situaciones y conflictos te ofrecen.

¿Qué puedes hacer para conseguir conectar contigo mismo/a?

  1. No depender de nadie más, hacer a cada momento lo que uno siente y lo que a uno le apetece es algo sencillamente maravilloso.
  2. Anotar tus pensamientos y reflexiones personales en un journal
  3. personal es otra técnica muy útil para conectar contigo.
  4. Estoy convencida de que, tras una salida por la naturaleza, has vuelto a casa con la sensación de haber desconectado.
  5. Otra de las técnicas más eficaces que conozco para conectar con uno mismo es la meditación. ¿Quieres aprender a meditar?
  6. Centrar la atención en nuestra respiración durante unos minutos ayuda a calmar la mente y alejarnos del ruido.
  7. Disfrutar de un buen paseo en solitario, con música o sin ella, te brinda la oportunidad de mantenerte más en el momento presente.
  8. No reprimas tus emociones
  9. Disfrutar de tiempo de calidad
  10. A veces nos olvidamos de que el silencio también es un modo de expresión.

 

Flexibilidad Emocional

Date permiso  para equivocarte, enfadarte, y llorar. También para sentir rabia y enojo, para perdonarnos, sanarnos, recuperarnos y ser felices.La flexibilidad emocional se refiere a nuestra capacidad de adaptarnos, ajustarnos creativamente, a los cambios y a situaciones inesperadas.

“Si decides ser flexible, te quitarás un enorme peso de encima al ver que nada está predeterminado y que puedes ser el último juez de tu propia conducta.”

Walter Riso.

 

Las personas que son muy rígidas, es decir, poco flexibles, generalmente buscan tener todo bajo control, al no lograrlo surge la frustración, la ansiedad y la depresión.

La flexibilidad emocional nos provee de una gran herramienta para no quedar atrapados en una emoción.

El ser flexibles en nuestra vida nos puede ayudar a equilibrar nuestras emociones y vivir nuestro presente a plenitud. También nos ayuda a bajar el nivel de exigencia, ya que, si lo llevamos al extremo, puede ser perjudicial. Ser más flexible, no quiere decir que perdamos calidad en nuestras acciones. Simplemente nos permitirá ser más eficaces, ya que si estamos todo el día controlando las cosas que nos rodean, es algo agotador, física y mentalmente, y es donde pueden venir los problemas.

Es una característica que nos ayuda a ajustarnos más fácilmente a las nuevas circunstancias, retos y situaciones cuando surgen. Ya sea comenzar en un trabajo nuevo, tomar una clase nueva o casarnos, ser cognoscitivamente flexible nos ayuda a crecer y a llevarnos mejor con los demás.

Algunos de los beneficios de fomentar nuestra flexibilidad emocional son:  

– Logra un equilibrio dinámico emocional ante los cambios

-Significativa detección del stress antes de que se instale.

– Mejor equipamiento para gestionar las incertidumbres.

– Aumenta el autoconocimiento.

– Escucha activa.

 

 

 

Conecta Contigo Mismo

Llevamos un estilo de vida acelerado, todo lo realizamos en un estado de desconexión, en ocasiones no sabemos como llegamos a un lugar o que cantidad de alimento hemos consumido. Esto ocasiona un deterioro en nuestra salud física y mental, y es evidenciado en los casos actuales de ansiedad y estrés elevado.

El cuidado de nuestra salud mental requiere de esfuerzo y dedicación, un reencuentro con nosotros mismos, compasión, amor, escuchar nuestro cuerpo, conectándonos con el.

El conocer nuestras emociones y como reaccionamos ante los eventos, el ser mas conscientes de nuestra existencia y de todo aquello que nos rodea.

Tienes que permitirle se a esa emoción, ya sea miedo, ira, tristeza, son parte de ti y te están conectando contigo mismo.

Para lograr esa conexión y equilibrio debes iniciar esa gestión de permitirte sentir de conocer la emoción, de nombrarla sin temor, hazle espacio a lo que sientes. Permite estar triste, ansioso, enojado, observa la emoción sin juicio.

Sigue estas recomendaciones:

  • Practicar a diario  unos minutos de meditación, permanece mindfulness, conectado con el momento presente. Observa tus pensamientos y emociones, sin juicios, sin resistencia.
  • Escucha tus emociones, en algunos casos, se remonta a situaciones del pasado inconclusas, es decir, aquellas que siguen provocando sufrimiento a día de hoy ya que en su momento no las cerraste de manera adecuada. Otras emociones se deben a carencias afectivas de la infancia. 
  • Silencio, Sin ruido, sin música. Escucha sólo el silencio o los ruidos cotidianos, sin nada que interfiera.
  • Contacto con la naturaleza, al menos un par de veces al mes. Pasea en contacto con la energía natural. Abraza un árbol, camina descalzo/a por la playa, escucha el sonido del agua, deja que el sol te bañe.
  • Genera energía positiva Lee un buen libro,  Desconecta de la televisión, del móvil. Elige una novela que te haga soñar o un libro que te haga reflexionar.
  •  Escribir es terapéutico en si mismo. A modo diario o de manera reflexiva o poética. Es una manera de poder tomar distancia con los pensamiento o emociones, de aclarar ideas y de vomitar todo aquello que te oprime. 9.
  • Dibujar y colorear ayuda a aquieta tu mente, es excelente para desconectarnos y enfocarnos en el momento presente. 

Ámate
Medita
Piensa de manera positiva
Cuida tu cuerpo
Trabaja tus fortalezas y debilidades

 

Me Amo y Acepto

Amar  nuestro cuerpo tal cual es, sin necesidad de compararlo con los modelos impuestos es un buen comienzo. Quiere cada centímetro de tu cuerpo.

Aceptarnos y arrojar todo nuestro repertorio de “deberías”, siendo tan sólo, nosotros mismos, dejando así nuestra propia firma.

Aceptar y expresar de manera adecuada nuestras emociones es fundamental para llevar una vida sana.

Conocer y aprender a usar nuestra mente constituye una herramienta valiosa para nuestro crecimiento personal y social.

Puede que en algún momento llegarás a olvidar que el amor de tu vida eras tú, porque le diste más importancia  a otras personas.  Podría ser que nunca lo supieras porque creciste con inseguridad, y nunca te enseñaro  amarte como persona.

Siempre llega un momento en que necesitamos desprendernos de cosas, de personas, de situaciones, dejar los apegos. Algunos lo llamarán egoísmo, pero yo lo llamo amor propio.

El amor propio no se enseña en las escuelas, en realidad, es un aspecto que todos  vamos descubriendo poco a poco, como quien encuentra un arma de poder de la que nadie le había hablado antes.

 ¿Por qué suele ocurrir esto?

  • En nuestra sociedad nos educan y nos trasmiten el necesario valor de amar y respetar a los demás, lo cual es, sin duda, algo esencial. No obstante, no es común que nos inculquen la necesidad de querernos a nosotros mismos.
  • El amor propio, el pensar simplemente que yo soy el amor de mi vida, no es un acto de egoísmo. No desde el momento en que esta dimensión está enfocada a construir y proteger nuestra autoestima.
  • El amor propio es un sentimiento que no debe avergonzarnos. Se trata no sólo de una herramienta para el bienestar interno, es  mantener un equilibrio con el cual, empatizar y respetar también a los demás. yo

Busca tu   equilibrio para ser felices, y poder ofrecer bienestar a quienes amamos. 

  • Mantén un dialogo interno: analiza qué aspectos y situaciones cotidianas vulneran tu autoestima, y te alejan de quien eres en realidad. Tal vez debas dejar determinadas cosas, e incluso algunas relaciones puntuales.
  • Empatiza contigo mismo: Así como Comprendes la situación de los demás, su dolor, sus necesidades…

¿Y las tuyas? ¿Qué te dirías a ti mismo si estuvieras ante ti?

Eres auténtico, único e irrepetible.

Es una realidad que debes empezar a creer desde hoy mismo.

Dispones de virtudes, características y de una esencia que te hacen único en este mundo, y por tanto, importante.

Adicciones Una Estrategia Para Evitar Lo Que Sentimos

Cuando se vive con ciertos niveles de ansiedad se buscan diferentes maneras para no sentir esto desagradable, muchas persones para evitar y huir de ella recurren a uso desmedido de alcohol, sustancias controladas, sexo, todo lo que puedes hacer compulsivamente, en exceso que te distraiga, incluso las redes sociales. Como Sociedad vivimos huyendo de lo que sentimos, nos refugiamos en series de televisión, abrir el Facebook cada 5 minutos.

La adicción es como una herramienta para lidiar con la ansiedad, como el uso excesivo de la nicotina, por eso cuando se habla de trabajar con la ansiedad, hay que auscultar esa parte emocional, descubrir la verdadera razón del uso desmedido, que la persona sepa qué hacer con la ansiedad. Muchas veces nos enfocamos en erradicar la adicción, pero que hacemos cuando regresa o permea la ansiedad. En ocasiones la persona sustituye una adicción por otra, por ejemplo, comer sin control, comprar o trabajar.

Evitamos por todos los medios sentir, conectarnos con nuestras emociones, llorar desahogarnos, pensamos que las adiciones te hacen sentir en control, pero es una ilusión, porque te alegan de lo que necesitas sanar, se sentir, de encontrarte contigo mismo.

También la ansiedad puede hacer aparición en los momentos de abstinencia, puede ser desde un día después de haber consumido o bien cuando dejas de consumir después de mucho tiempo. Lógicamente tu cuerpo pasa por un proceso de readaptación, de cambios internos, suelen ser incomodos, y quizás la persona no está acostumbrada a ellos y aparece la ansiedad. De hecho, se ha descrito un trastorno de ansiedad que considera que la misma puede estar inducida por sustancias (o, dicho de otro modo, ser consecuencia de su uso frecuente y excesivo). En el trastorno de ansiedad inducido por sustancias, los síntomas de ansiedad están asociados al consumo, abuso o dependencia de una droga (cafeína, nicotina, alcohol, cannabis, cocaína, heroína, éxtasis, etc.). Los consumidores habituales de drogas presentan niveles de ansiedad más altos que los no consumidores, incluso después de haber abandonado el consumo (incluso periodos superiores a los seis meses).

A veces, en otras situaciones incluso todavía más cotidianas, como, por ejemplo, cuando una persona intenta dormir, trabajar, o estudiar, surge también la ansiedad. Algunas personas    experimentan fuertes reacciones de ansiedad en su vida cotidiana e intentan reducir su malestar tomando algún tranquilizante o ansiolítico. Muchas personas llegan a convertirse en grandes adictos de estas drogas legales.

La ansiedad suele hacer aparición en momento de poca tolerancia y frustración, cuando no sucede lo que quieres. Así que la ansiedad puede aparecer antes o después de las adicciones, y en ocasiones es motivo de recaídas, y también el hecho de que en el proceso de abstinencia es fácil recaer porque realmente el cuerpo lo está pidiendo, quizás porque sucedió algo en proceso que no pudiste tolerar, alguna tristeza, molestia o la ansiedad. No es que no puedas vivir sin consumir, si no que no sabes cómo lidiar con tus emociones.

Lipschitz (1988) llega a afirmar que las causas más frecuentes de ansiedad son la intoxicación por drogas y los síndromes de abstinencia. Este autor revisa un gran número de estudios sobre relaciones entre diversas drogas (cafeína, marihuana, nicotina, neurolépticos, alcohol, tranquilizantes, heroína y metadona) con la ansiedad. Las conclusiones más importantes a las que llega son las siguientes:

  • La cafeína generalmente causa o exacerba la ansiedad. La abstinencia suele producir dolores de cabeza y adormecimiento. En personas que padecen trastornos de ansiedad puede aumentar considerablemente su sintomatología.
  • La marihuana generalmente produce ansiedad. La intoxicación aumenta los síntomas de per- sonas con trastornos previos de ansiedad. Su efecto no se limita a personas novatas en el consumo de esta droga, sino que se han observado ataques de pánico repentinos en consumidores habituales. Estos ataques de pánico son más frecuentes en personas que padecen este tipo de trastorno, o si la marihuana se ingiere.
  • La ansiedad puede también producirse por intoxicación con nicotina de tabaco o de otras fuentes. Esta ansiedad es usualmente de duración breve, ya que la nicotina es eliminada rápidamente
  • La abstinencia de diversos tipos de drogas puede producir ansiedad. Quizás el caso más común es el del alcohol, pero también sucede con tranquilizantes menores o el tabaco. En general, el comienzo y la duración del síndrome de abstinencia varía de unos tranquilizantes a otros, dependiendo del tiempo que dura su efecto.
  • La ansiedad es también un síntoma común de la abstinencia de los narcóticos. Aquí, también, la demora de los síntomas depende de la duración de la acción del narcótico.

El síndrome de abstinencia de la heroína puede ocurrir después de unas horas desde la última dosis, mientras que los síntomas del síndrome de abstinencia de la metadona pueden retrasarse varios días.

El abuso de sustancias tóxicas susceptibles de adicción a la larga produce tres fenómenos característicos: 1) tolerancia, es decir la necesidad de aumentar progresivamente la dosis para producir los mismos efectos; 2) dependencia psíquica, o habituación; y 3) dependencia física, que se refiere a la aparición de síntomas físicos (síndrome de

El síndrome de abstinencia

Incluye una serie de síntomas físicos característicos de la alta activación fisiológica, propia de los estados de ansie- dad. Otros síntomas son igualmente desagradables e incluso dolorosos. Por ello, el adicto teme al síndrome de abstinencia. Probablemente, este temor hace aumentar, a su vez, los síntomas de activación fisiológica.

El síndrome de deprivación alcohólica varía desde una sintomatología ansiosa (temblores, alteraciones del sueño, etc.) hasta reacciones más severas, tales como convulsiones o el delirium tremens. En los alcohólicos la abstinencia del consumo de alcohol suele producir ansiedad, temblores, insomnio, náuseas, vómitos, anorexia, sudoración, etc., es decir, alta activación adrenérgica. Estos síntomas se incrementan cuando hay algún tipo de estrés emocional adicional, o cuando hay un pobre control de la ansiedad y el miedo que producen estos mismos síntomas. Las alucinaciones y el delirium tremens, cuando se producen, suponen también trastornos perceptivos e ilusiones, además de una activación autonómica exacerbada.

El síndrome de abstinencia de las benzodiazepinas incluye síntomas tales como ansiedad, náuseas, cefalea, alteraciones de la percepción, incapacidad para conciliar el sueño, e incluso con- vulsiones generalizadas, o delirio. La supresión en el consumo habitual de la cocaína suele producir insomnio, aumento de la actividad motora e incluso ideas suicidas, pudiendo aparecer también delirio. Los opiáceos presentan un cuadro de absti- nencia que puede incluir insomnio, agitación, piloerección, contracturas, calambres, dolor muscular, dolor abdominal, taquicardia, hipertensión, fiebre, hiperventilación, anorexia, náuseas, agitación, diarrea, vómitos, etc.

Se han encontrado diferentes variables a tener en cuenta a la hora de seleccionar el tratamiento concordante (tipo de paciente y tipo de tratamiento), una de las encontradas es la ansiedad, como variable relacionada con el consumo (de alcohol o tabaco) para reducir el malestar subjetivo y la activación fisiológica. Los sujetos que consumen con estos fines necesitan en su tratamiento técnicas de reducción de ansiedad. Esto es especialmente indicado a la hora de programar la prevención de recaídas. A la hora de decidir qué técnicas de reducción de ansiedad se deben aplicar, primero hay que hacer una evaluación individual que incluya las manifestaciones de la ansiedad en los tres sistemas de respuesta y ante diferentes situaciones, para después aplicar los principios del punto anterior.

Por eso es importante no enfocarse tanto en la conducta adictiva, si no en lo que subyase debajo de esa adiccion, enfrentar la ansiedad y el dolor emocional.

 

  1. Aceptando
  2. Sintiendo
  3. Desahogando
  4. Aprendiendo a usar tus emociones
  5. Comparando como a medida que vas manejando la ansiedad, va disminuyendo la adicción.