Una posición de reposo, se trata de bajar suavemente la espalda, cadera, y estirar los hombros.
Cómo hacerlo: de rodillas, inclínate hacia adelante con la frente sobre el tapete. Coloca los brazos a los lados del cuerpo con las palmas hacia arriba al lado de los pies o las palmas hacia abajo estiradas sobre la cabeza. Respira profundamente, centrándote en la respiración con los ojos cerrados. También puede ser una buena pose para el insomnio.